Castellano

Prix Di Tella 1963

Reseña

Texto vinculado a la Exposición Premio Instituto Torcuato Di Tella, 1963

Me doy cuenta muy bien de cómo Noé se lanza al asalto de la pintura como se lanza al asalto de la calle con la glotonería de un niño. Sale de su casa, la luz lo enceguece, los afiches brillan, los hombres pasan, las mujeres están ocupadas, ya es bastante por hoy, es bastante para el cuadro, dejemos a otros la Gioconda y la Venus de Milo .
Vuelve a su casa, abre la puerta, “¡Ah! –se dice–, es bárbara esta puerta, la meto en el cuadro”. Tal como la desmonta y la coloca sobre la tela es hiperrealismo: se abre y se cierra –sin ninguna intención filosófica, si la intención se desliza es fortuita– y está contento, le gusta esta puerta que es a la vez elemento de ruptura y ritmo, pero no nos equivoquemos, todo no es gratuito, hay mucha lucidez razonante en Noé. Por supuesto, no se acepta así nomás de movida una puerta en un cuadro, sobre todo para un premio importante. Por lo tanto, es otro cuadro de Noé el que obtuvo el premio, aquel que tiene “intenciones políticas”. Pequeñas telas agregadas se contornean en el espacio por encima de la tela principal como si fueran las cabezas cortadas de los aristócratas en la punta de los fusiles de los sans-culottes.



Germaine Derbecq. "Prix Di Tella 1963", en Le Quotidien, Buenos Aires, 1963